Durante el proceso de rehabilitación de drogas es normal encontrarnos con episodios de antojos o “craving”, síntoma natural de la adicción. Y aunque resulta inesperado, incómodo e incluso confuso existen algunas formas con las que se pueden lidiar con ello.
Lo primero que debemos entender es que todos los que se involucren en un comportamiento adictivo experimentarán deseos intensos de consumo (craving). Al comienzo de la recuperación pueden ser bastante intensos e irán disminuyendo en fuerza y frecuencia con el paso del tiempo.
Existen muchas estrategias de afrontamiento que son útiles para resistir y desactivar estos antojos. Para muchas personas los impulsos y los antojos de usar drogas o alcohol provocan respuestas automáticas. Aprender a decir NO a estos deseos intensos y arraigados, es uno de los mayores desafíos en la recuperación.
Estos son algunos consejos para manejar los antojos durante la rehabilitación de drogas:
Retraso:
La actividad mental que se produce durante un episodio de antojo e impulsos desaparecerá con el paso del tiempo, a menos que la atención hacia ello continúe activamente.
Testimonios de pacientes indican que lo más intenso del deseo se presenta durante los primeros 4 a 6 minutos, aunque no hay consenso al respecto. Lo importante es no ceder, sin importar cuán grave sea el impulso, te aseguro que pasará.
Todos los impulsos que has tenido han pasado. Una vez que hayas negado un impulso, sabrás que puedes hacerlo una y otra vez (autoeficacia), y después de un corto tiempo habrá menos antojos.
Escape:
Aléjate de la situación que provoca urgencia a primera instancia. No te pongas a prueba y sal del lugar que está detonando el deseo para que puedas liberar tus pensamientos del condicionante.
Solo el acto de escapar del gatillo enfocará tu mente en algo nuevo, lo que disminuirá rápidamente el impulso.
Aceptar:
Pon tus deseos y antojos en perspectiva, para entender que son normales. Es importante en el proceso de recuperación durante la rehabilitación de drogas aprender a aceptar las molestias y convivir con ellas como signos de tu sanación.
Disputa:
Lucha por mantener tus logros alcanzados. Existen ejercicios que ayudan a diagnosticar productivamente situaciones de riesgo y desarrollar tácticas útiles para darles pelea cuando ocurran nuevamente.
Sustituto:
Cuando tengas ganas de consumir, sustituye esta acción rápidamente con un pensamiento positivo o una actividad que sea más beneficiosa y divertida. Sal a caminar o haz cualquier otra forma de ejercicio. Elije algo nuevo para leer o enciende algo para escuchar. Canta, baila, pinta, grita si es necesario. Las posibilidades de sustituir y reemplazar los pensamientos de consumo son infinitas.
Respirar:
No olvides que si estás viviendo un craving o antojo intenso, lo primero que debes hacer es respirar profundo, inhalar, exhalar. Regular el proceso de respiración te ayudará a tomar consciencia del presente y poner en alerta tu defensa.
Recuerda.. “El autocuidado es un acto revolucionario de amor”.
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